GEOCENTRISMO

Nos aferramos tanto a lo que nos parece evidente. Y parece más evidente lo que tenemos enfrente que lo está un poco más allá. El Medi-terráneo es el mar que está en medio de la tierra. La China es el Imperio del Centro (de la tierra). Etc.

Parece evidente que el sol se desplaza alrededor de nosotros. Costó aceptar la simple verdad de que es la tierra quien gira alrededor del sol. En realidad no estamos en el centro de nada, pero de modo natural creamos un centro imaginario y lo llamamos 'yo'; pero esta es otra película, para otro día. El geocentrismo de hoy sa llama cerebrocentrismo. Se crean unas atrayentes imágenes de los flujos de sange en el cerebro, y a esos colorines los llamamos 'amor', 'autoestima', y otras bobadas.

Encontré un documento con el atractivo título de 'Buscar la llave donde hay luz y no donde se perdió'. En él, Mag Castañón (Psicólogo) y Mª Concepción Láez Álvarez (Psicopedagoga) examinan las neuro-chorradas, es decir, los intentos de explicar algunos fenómenos por medio teorías y herramientas de otros ámbitos (algo así como querer explicar lo que hace Vd en este momento con su ordenata en base a mediciones de la electricidad que se consume en diferentes zonas del aparato). Empieza así:

"A día de hoy la Psicología es tan promiscua que tiene muchos amantes, pero no puede complacer a uno sin irritar a los otros y los irritados también le son infieles flirteando con otras prácticas ajenas a la propia psicología. Así, muchos psicólogos renuncian en parte a su campo para caer fascinados y atrapados en los brazos de la neurología, la genética, la biología o la metafísica cognitiva. Se convierte lo psicológico en el campo de Agramante; en un lugar donde reina el desorden y la confusión y donde todos pelean o riñen con todos, o en el pandemonium, capital del infierno, donde todos gritan porque creen tener la razón. Este fuego infernal en el que arde la psicología, quieren apagarlo con gasolina otros galanes como neurólogos, biólogos, fisiólogos o bioquímicos.
Bajo el rótulo general de “neuro científicos” intentan dar cuenta “de una vez por todas” de la conducta humana apelando al cerebro, a sus estructuras y funcionamiento como el fundamento del comportamiento humano. ..."

En la Escuela de Filosofía de Oviedo, los días 12 y 13 de diciembre pasado, Marino Pérez Álvarez impartió cuatro lecciones basadas en su último libro EL MITO DEL CEREBRO CREADOR: CUERPO, CONDUCTA Y CULTURA. El título del curso era "Confrontando el cerebrocentrismo que nos invade: Cuerpo, Conducta y Cultura". Por fortuna para nosotros se grabó y está en youtube. Merece la pena dedicarle una horas.

Lección 1

Lección 2

Lección 3

Lección 4

Que aproveche!